domingo, 23 de diciembre de 2012

Los mundos de Yupi (Resumen de la sesión del 23/12/12)

A su regreso de los pantanos los personajes informan a los señores y les dicen que los pictos se reunirán con ellos en tres semanas. 
Llegado el momento, parten hacia el lugar acordado para el encuentro, y allí, en una larga reunión, se decide que se dividirá a los pictos en varios grupos: los guerreros quedarán en las montañas para frenar posibles ataques de los glabros y los ancianos y los niños serán enviados a tierras aquí y allí, incluyendo regiones en los principados de Fischler y Siegen, que se muestran receptivos a la llegada de los pictos.

Llega el invierno y las semanas pasan lentamente, con algunos rumores no contrastables sobre problemas con los bárbaros asentados en Fischler. Llegan también un grupo de pictos del clan del lobo para informar de que el clan de las Tres gemelas ha raptado a su rey, y que todo parece presagiar un enfrentamiento entre los dos clanes, con el consecuente enfrentamiento entre los clanes menores aliados.
Parten para allí para ayudar a los pictos a liberar al rey de los lobos, pero antes rescatan a Samuel, un joven preso al que iban a ajusticiar por robar algo en las tierras de Max de Homburg. Ya en el camino Samuel les confiesa que es miembro de la cofradía de los hombres libres, un pequeño grupo de guerreros exiliados desde la guerra que sobreviven en la montaña.
Una noche va a buscar a sus aliados y regresa con una prisionera: una hechicera del clan de las Tres gemelas, pariente de Ulf, el heredero del clan de las Gemelas a la cual toman como rehen.
Continúan el viaje que pronto se convierte en una lucha férrea contra el frío y la nieve, mientras se acercan, lentamente, hacia la fortaleza donde aguarda el clan de las Gemelas. 

martes, 4 de diciembre de 2012

Los mundos de Yupi (Resumen de las dos últimas sesiones)


Nuevos contactos con los salvajes.
De vuelta al campamento base, informaron de lo que habían visto; la ermitaña apareció para informarles que dos grupos numerosos de pictos avanzaban con intención de rodearles, por lo que decidieron acudir a una misteriosa ciudad abandonada cuyas murallas estaban casi intactas.
Los pictos les sitiaron allí, pero tras una espera de dos días, se marcharon apresuradamente ante la llegada de una amenaza: los glabros. Estos se lanzaron sin esperar al asalto de la fortaleza, y lograron, gracias a sus aves del terror saltar la primera defensa, causar una masacre en el patio y obligar a los supervivientes a encerrarse en la torre del castillo. Los Pjs escaparon de allí con algunos guerreros más y encontraron, a unas horas de distancia camino de Albstad, a un numeroso grupo que venía del pueblo para ayudarles: los hombres de Stefan "el enano" comandados por Pedro Cabezas, habían huído en vez de encerrarse en la fortaleza y habían ido a por refuerzos.
Volvieron a la fortaleza, sorprendieron a los glabros y los exterminaron. Después volvieron a Albstad. Allí contaron cuanto habían visto y propusieron, ante la poca eficacia de las dos reuniones sostenidas por los señores de la región, intentar pactar con los pictos haciendo causa común contra los glabros. 
En su búsqueda para contactar con los pictos fueron apresados por los dolomitas, la tribu  picta de "las Tres Gemelas". Fueron rescatados por los golominos o clan del lobo, otra de las numerosas tribus de pictos; estos deseaban pactar, pero necesitaban recuperar el prestigio que habían perdido dentro de las tribus en los últimos tiempos, para lo cual necesitaban atacar a un grupo de glabros que se habían atrincherado en una zona pantañosa entre las montañas y el mar, y acabar con su lideresa, una poderosa "diosa".
Los PJs volvieron una vez más a Albstad con las noticias, y partieron hacia la costa norte para conecer a un contacto que les alquilaría barcos para llevar a los pictos hasta los pantanos. El contacto resultó de Rick "el moteado", quien les alquiló tres barcos e intentó jugársela otra vez vendiéndolos a los vikingos. La aparición de los hombres del difunto Alfredo de Villacañas, expertos piratas, ayudó a alejar a los vikingos.
Recogieron a los pictos, llegaron hasta los pantanos, donde conocieron a unos extraños "hombres-pescado", atacaron a los glabros y los mataron, llevándose como trofeo la cabeza de su hechicera.